Sandy Powell: «En mi trabajo lo que cuenta es la experiencia, y me parece estupendo»
Sandy Powell es una de las grandes figurinistas de la escena internacional. Comenzó a diseñar y cortar sus propios patrones siendo una niña en el Londres de los años 60, una ciudad que siempre se ha caracterizado, según cuenta, por un espíritu abiertamente individualista en la forma de vestir. Logró inscribirse en la Central Saint Martins, la escuela referente mundial en arte y diseño. Enseguida le llamaron para trabajar en teatro, en una época intensa y creativa en la que lo interesante era experimentar. Por entonces su fuente de inspiración era el mimo, bailarín y coreógrafo Lindsay Kemp, que también fue maestro y mentor de David Bowie. Tuvo la oportunidad de ponerse en sus manos y empaparse de su arte.
El cine llegó más tarde de la mano del director, escenógrafo y escritor británico Derek Jarman. Y en lo que lleva de carrera ha sido nominada en doce ocasiones a los premios Oscar, habiendo conseguido 3 estatuillas por las películas Shakespeare in Love (1998), El aviador (2004) y The Young Victoria (2009). También ha sido nominada en trece ocasiones a los premios BAFTA, habiendo conseguido dos por las películas Velvet Goldmine (1998) y The Young Victoria (2009). Fue nombrada Oficial de la Orden del Imperio Británico en 2011 por sus servicios a la industria del cine.
Al preguntarle por ella a una amiga que pertenece al gremio, me dijo literalmente que es la top of the tops.
En este vídeo ha sido realizado para la plataforma The Female Lead con el fin de mostrar mujeres líderes en campos muy diversos para que sirvan de referentes a las nuevas generaciones de mujeres. Un consejo que da: «tienes que estar preparado para trabajar muy duro, por muy poco, durante un largo período.»
Sandy Powell en una entrevista dirigida por Marian Lacombe, en 2017, para The Female Lead.
Estas son las cuatro películas premiadas por los Oscars y los BAFTA.
Su primer trabajo para el cine se lo ofreció el director británico Derek Jarman con la película Caravaggio, que se estrenó en 1985. Resultó ser también la primera película para la actriz Tilda Swinton.
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